Tips para realizar una limpieza energética en tu hogar
Hoy quiero presentarte estas recomendaciones que te ayudarán a poner todo en su lugar, en especial a equilibrar las energías en tu hogar. Sabes que todo, incluyéndonos es energía. Es importante que el ambiente que habitamos sea armónico, recordando que como es nuestro exterior, está nuestro interior.
En lo particular cuando me siento un poco revuelta por dentro, que no me permito ni siquiera meditar, porque mi mente está tan intranquila que no logro conseguir un momento de conciliación, opto por acomodar mi entorno y eso es una herramienta súper poderosa, para que las cosas comiencen a calmarse dentro.
De todas formas para seguir estas recomendaciones, no necesitamos un caos interno, solo el deseo de mejorar nuestro entorno para que nosotros podamos sentirnos a gusto, así como cualquiera con quien compartamos ese espacio físico.
Ordenar:
El primer paso y en mi caso el más relajante es ordenar, colocar las cosas en su sitio, redistribuir, pensar en nuevas propuestas que optimicen la organización de nuestras cosas. Este importante paso, nos lleva a un segundo: salir de lo que ya no está en uso o no nos gusta.
Salir de cosas que no utilizamos o dejaron de gustarnos:
Cuando estamos organizando, vamos a darnos la libertad de tomar, sin mayores pasiones, todo aquello que ya no represente ninguna utilidad, que no nos guste, que solo nos ocupe espacio.
Aquí depende mucho de qué tan apegados seamos con las cosas materiales y cómo sea nuestra mente de forma predominante en cuanto a la prosperidad o la escasez. Si pensamos que lo vamos a necesitar luego, si pensamos que si lo necesitamos no vamos a poder adquirirlo nuevamente, etc, es lo que se nos puede venir a la mente cuando estamos conectado con la escasez.
Mientras más cosas saquemos, más espacio tendremos para colocar cosas nuevas o que nos resulten más útiles, o simplemente contaremos con ese vacío que resulta tan relajante. Además de que el botar, regalar, vender cosas pertenecientes a nuestro pasado, nos dan esa sensación de cortar con algo de nuestro pasado y mirar las cosas desde otra perspectiva.
Limpiar:
Una vez que hemos puesto todo en orden, que para ello, la limpieza de seguro ya tuvo algo de acción, pues pasaremos de lleno a esta fase, en la cual nos encargaremos de limpiar cada uno de los rincones de nuestro hogar. Esto, al igual que la organización nos puede tomar varios días, pero podemos distribuirnos de acuerdo a nuestra disponibilidad, penando que es una de las mejores inversiones y que solo nosotros podemos conectarnos con ese proceso de reacondicionamiento y limpieza en pro de tener el ambiente con la mejor energía disponible.
Debemos asegurarnos de limpiar todo, en lo particular, cuando estas limpiezas profundas, procuro que hasta los zapatos que están guardados queden limpios por debajo. Cada cual a su estilo, pero procurando colocar la mejor intención en la acción.
Si tenemos aires acondicionados/calefacción, debemos asegurarnos de darle el correspondiente mantenimiento. Los filtros deben estar funcionales y limpios y garantizar que el aire circulante está en armonía con nuestra salud.
En caso de tener alfombras, debemos darle especial cuidado a su limpieza, ya que acumulan gran cantidad de bacterias y por lo general no son removidas con regularidad.
En caso de tener mascotas, debemos asegurarnos de que estén libres de plagas y estén limpios. Si hacen sus necesidades en la casa, pues se debe atender con la mayor prontitud la limpieza de las mismas, evitando los malos olores, la presencia de otros animales y la creación de un ambiente desagradable.
Redecorar:
Pensemos en algunos cambios que podamos aplicar a nuestra casa, cambiar los muebles de lugar, sustituirlos, cambiar algunos elementos decorativos como cuadros o adornos. Lo importante es generar la sensación de cambio que renueve el espacio y nos haga sentir una experiencia diferente.
Colocar esencias o velas aromáticas:
Una vez realizada la limpieza general y la redecoración, buscaremos alguna esencia con la que nos sintamos cómodos: puede ser lavanda, canela, sándalo, manzana, etc… Con algunas sentirán mayor relajación y con otras, el ambiente un poco más vivo, escoge la que requieras en este momento, la podemos colocar en los difusores especiales para ello o si quiere un efecto más sutil, agregar unos chorritos al agua con la que finiquitaremos la limpieza. También puedes colocar velas o palitos aromáticos.
Asegúrate de que exista buena circulación de aire:
Procura abrir las ventanas de forma periódica, en espacial si vives en países con estaciones donde el aire acondicionado o la calefacción llevan el dominio del ambiente. La circulación del aire renueva la calidad del ambiente y nos da la sensación de movilizar las energías de nuestro hogar, es por ello que lo recomendamos hacer con la mayor frecuencia posible.
Cargarte de la mejor de las vibras:
Estamos vibrando continuamente, asegurémonos de que nuestros pensamientos, nuestras palabras y nuestras emociones estén contribuyendo a una vibración que nos haga sentir en bienestar.
Pues si sigues estas recomendaciones, que no incluyen pólvora, rezos, espanta muertos, ni nada de eso… te aseguro que tendrás un ambiente divino para habitar y tanto tú como tu ambiente estará en el mejor punto energético posible.
Por: Sara Espejo – Reencontrate.com