2020… un año difícil de olvidar

2020… un año difícil de olvidar
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Este año que termina nos deja a la mayoría un sabor amargo en la boca. Nos deja sin algunos de nuestros principales afectos, con negocios quebrados, con cuentas que no sabemos cómo cubriremos, con metas no alcanzadas… Sí, ha sido un año fuerte, incluso para aquellos que sentimos íbamos surfeando la ola, pues terminamos perdiendo nuestras tablas.

Pero como debemos hacernos expertos en rescatar en cada situación lo bueno, lo favorable, lo que nos hace crecer, pues eso haremos y comenzaremos por dar las gracias por estar leyendo este mensaje. Sí, puede ser que las condiciones en las que lo leemos no sean las que quisiéramos. Pero el estarlo haciendo nos dice: ESTAMOS AQUÍ, VIVOS y ya eso es una ganancia incalculable.

Aprendimos muchas cosas

Hemos aprendido a darle un valor diferente a nuestros afectos. Sabemos lo importante que es compartir con nuestros seres amados, sabemos el valor de un beso, de un abrazo. Nos hicimos responsables y nos adaptamos a medidas drásticas, por nosotros y por los que amamos.

Aprendimos a no dar nada por sentado, aquello que considerábamos parte de nuestra rutina, de nuestra dinámica diaria, de un día a otro cambio, nuestro piso se movió y tuvimos que realizar ajustes en el camino. Muchos de nosotros nos vimos forzados a reinventarnos a explorar caminos desconocidos y eso nos llevó a descubrir algo nuevo en cada uno, a encontrar recursos donde no teníamos ni idea de que existían.

De seguro ya no lo pensaremos tanto cuando nos inviten a algún lugar, cuando nos inviten a compartir, bien sea entre amigos o con personas que nunca hemos visto. Porque aprendimos a darle importancia a la compañía, al conversar, al mirarnos a los ojos sin un dispositivo de por medio.

Entendimos que la tecnología se volvió un gran aliado en nuestras comunicaciones, que no solo servía como plataforma para desahogarnos por medio de algún post, compartir algún logro o dar señales de vida, sino que nos sirvió para sostener largas conversaciones con esas personas que no teníamos cerca, permitiéndonos de alguna manera acortar distancias. Además de ser el soporte de muchos negocios existentes y emergentes.

Los pequeños no se escaparon de familiarizarse con la comunicación a distancia y hoy en día la mayoría son expertos en plataformas como Zoom, Google Classroom y otras cosas menos útiles como Fortnite y Amoung us.

Nos dimos cuenta de quiénes habían permanecido demasiado tiempo en nuestras vidas sin que aportaran nada, dándonos la posibilidad de dejarles ir con bastante propiedad, abriendo un espacio que muy probablemente no le estaba dando cabida a algo mejor.

Muchos tuvimos que reconciliarnos con la soledad y terminamos amándola, valorándola y creciendo mucho a través de ella. Así como otros se vieron forzados a ampliar sus herramientas de convivencia para habitar día tras día un espacio compartido, pudiendo fortalecerse en sus núcleos o tomar radicales decisiones que incluyen distancia de por medio.

Nunca seremos los mismos

 

En todo caso, aun cuando en muchos sitios se respira algo un tanto más normal, todos sabemos que no somos los mismos. Para bien o para mal, este año nos movió de manera intensa… Somos afortunados de estar entre aquellos que podemos hablar, reflexionar e incluso intentar olvidar este curioso año… En lo particular recuerdo las palabras con las que definí el 1ro de enero de este año mi primer post personal: QUE SEA EL AÑO PARA TODOS… y bastante que lo fue, aunque para nada con la misma intención que lo pensé…

Esperemos que de ahora en adelante, desde este mismo momento todo lo aprendido comience a dar sus frutos, que la consciencia colectiva nos permita fomentar mejores relaciones y valorar lo que realmente importa. Que cada uno de nosotros esté dispuesto a dar lo mejor de sí, ahora, en este momento, que es el único del cual disponemos… Sin duda el 2020 nos deja como gran lección que no hay ningún plan con garantía de ejecución, salvo el de la muerte… Así que disfrutemos de cada momento, de cada afecto, de cada beso, de cada espacio de libertad, porque no sabemos cuándo será el último.

Brindemos por un 2021 MUY FELIZ para todos.

Por: Sara Espejo – Reencontrate.guru


Sara Espejo