Es increíble saber que, durante siglos, la luna llena ha sido culpada por los aumentos repentinos de las tasas de crimen y el extraño comportamiento que tienen los seres humanos. Y a pesar de que esta teoría ya haya sido rechazada por parte de científicos e investigadores, las supersticiones que hay alrededor de ella persisten.

Y sí, existe un significado cultural y espiritual detrás de todo esto, en el que muchas veces se expone que la luna puede dar forma al comportamiento consciente de las personas.

Sin embargo… ¿Qué es lo que dice la ciencia y la psicología al respecto? Eso es algo de lo que vamos a hablar a continuación:

¡Debe ser la luna llena!

Es un día normal, vas por la calle y de repente te encuentras con cosas inusuales como ver a alguna persona armar problemas a otra, a algún conductor manejar por la carretera de forma descuidada, o a alguien con algún comportamiento extraño.

Inmediatamente, regresas a casa y al anochecer ves que sale la luna. Recuerdas todo lo sucedido durante el día y es ahí donde dices: “¡Debió ser la luna llena!”.

Bueno, quizás no eres tú precisamente quien acostumbra a decir esto, pero, hay muchas personas que sí lo hacen y así lo creen. Y ojo, porque esto no es algo nuevo. Esta creencia viene desde la antigüedad. De hecho, el filósofo griego Aristóteles planteó una vez la hipótesis de que el brillo de la luna llena inducía locura. Con el tiempo, este rumor terminó convirtiéndose en una tradición.

Ahora bien, a pesar de siglos de culpar a la luna de las travesuras de ciertas personas, cambios de humor y sucesos místicos, la investigación científica sobre el tema continúa apuntando de que todo esto no es comprobable. Sin embargo, existen personas que siguen y seguirán creyendo en el poder de la Luna.

¿Qué originó esta superstición?

Como comentamos en el apartado anterior la hipótesis de que la luna causa ciertos efectos en el comportamiento del ser humano viene de Aristóteles. Él creía que debido a que el cerebro posee ciertas cantidades de agua, pues podría verse afectado de la misma manera que las aguas de la Tierra se ven afectadas por la Luna Llena.

Gracias a esto muchas personas hoy en día tienen la creencia de que como el cuerpo humano es aproximadamente un 70% agua, los humanos también experimentan cambios de marea causados por las fases de la luna, al igual que lo sufren los océanos de la Tierra.

Es más, hay quienes creen que bajo las noches de Luna Llena aumentan dramáticamente la ocurrencia de asesinatos, suicidios, robos, emergencias psiquiátricas y accidentes automovilísticos. Si bien la teoría parece razonable a simple vista, ha sido descartada por muchos expertos.

La evidencia científica

Astrónomos, físicos y psicólogos han llegado a la conclusión de que el comportamiento humano no está relacionado con la fase lunar. De hecho, hay estudios científicos que así lo avalan y que aseveran que la luna puede regular las mareas de zonas acuáticas grandes y abiertas, pero que su efecto en un vaso de agua, una bañera o el propio cuerpo humano, es nulo.

Es más, en 1985 varios investigadores realizaron un análisis de 37 estudios que comparaban los ciclos lunares con casos de llamadas a centros emergencia, suicidios, crímenes y problemas psiquiátricos. Los resultados no muestran ninguna relación entre la luna llena y el aumento de estas circunstancias.

De hecho, varios estudios modernos se hacen eco de estos hallazgos y aclaran que no hay ninguna conexión entre la Luna Llena y los ingresos psiquiátricos, ingresos hospitalarios, o comportamientos agresivos en personas.

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