Hola… ¿Sabías que repetir afirmaciones o decretos frente a un espejo estimula y acelera tu poder de manifestación?

Pues sí, entérate.

Esta práctica, de hecho, se usa mucho a la hora de querer programar la mente subconsciente para dar lugar a cambios positivos en nuestra vida.

Te cuento que, a veces, nuestra mente consciente puede estar deseando una cosa. Pero, nuestra mente inconsciente termina colocándonos límites que nos impiden poder obtenerla.

Así, por ejemplo, tú conscientemente tienes la idea de querer ser rico, pero inconscientemente, tienes una vocecita que te dice “naciste pobre, morirás pobre”.

Cuando el subconsciente está atascado en creencias limitantes, surge el pesimismo y el conformismo, haciendo difícil la tarea de manifestar aquello que tanto anhelas.

Ahora bien, ya que te has enterado de esto, pues voy a compartir contigo un decreto conformado por afirmaciones poderosas. Te aconsejo que lo repitas frente a un espejo, durante 21 días.

Hacerlo, te ayudará a reprogramar tu subconsciente para atraer prosperidad y abundancia, cambiando asimismo por completo tu forma de ver la vida.

Realiza este decreto frente al espejo durante 21 días

Si deseas, puedes escribir este decreto en una hoja o tarjeta y colocarla cerca de tu espejo, de esta forma no olvidarás realizar este ejercicio, hasta haber cumplido los 21 días.

Eso sí, repite el decreto mirándote a los ojos. Hazlo con mucha fe, con gran sentir, y convencido de cada palabra que te estés diciendo.

Sin más que agregar, aquí tienes el decreto…

Hoy, yo soy suficiente.

Soy lo suficientemente inteligente.

Soy lo suficientemente digno(a).

Soy lo suficientemente próspero(a).

Soy merecedor de todo lo bueno.

Soy un(a) ganador(a), nací para triunfar y para ganar.

Tengo suficientes recursos.

Tengo suficiente dinero.

Tengo suficiente amor propio.

Tengo suficiente salud.

Tengo suficiente capacidad de atención y recepción.

Estoy suficientemente seguro(a) de mí mismo.

Estoy sano(a).

Estoy suficientemente a gusto conmigo mismo(a).

Estoy feliz con mi vida.

Tengo la capacidad para manifestar los deseos de mi corazón.

Soy saludable, soy pleno(a) y soy rico(a) en todo sentido.

Confío plenamente en la fuente que habita dentro de mí y en Dios (o en esa gran Divinidad) como mi proveedor inmediato, ilimitado y permanente.

Mi vida está llena de riquezas mentales, espirituales y materiales.

Así pues, saludo este nuevo día con confianza, con una sonrisa en mi rostro, y con amor y paz en mi corazón.

Hoy, soy suficiente, aquí y ahora, en todo momento.

Así lo decreto, hecho está.

Gracias, gracias, gracias.

Sin más, deseo de todo corazón que este decreto te sea de mucha utilidad, pues verdaderamente sirve y yo mismo he comprobado su poder.

Para finalizar, te invito también a que eches un vistazo a los cursos y talleres que te ofrecemos en este espacio, y que van dirigidos a tu crecimiento personal y espiritual… ¿qué esperas? ¡Suscríbete a ellos ya!

Gracias por leer este post.

Un saludito.

Por: Adrian Alberto ∼ reencontrate.com

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