Deja a un lado la negatividad y conéctate con lo positivo para ser feliz
Dejar la negatividad de lado puede ayudarte a romper los lazos de pensamiento que no te benefician, aprender a controlar tus emociones de una manera más saludable y convertirte en una persona más feliz y resistente en general.
Tus pensamientos tienen un impulso, y si estás en una rutina negativa, puede ser difícil salir de ella. La buena noticia es que la positividad también tiene un impulso, y con esfuerzo y trabajo diario puedes romper los patrones de pensamiento negativos y reemplazarlos por buenos.
Dejar de lado la negatividad puede sonar simple, pero es tremendamente poderoso. Con las herramientas psicológicas adecuadas, puedes obtener más control sobre tus pensamientos de lo que podrías pensar. Si luchas con pensamientos acelerados, enojo, depresión o ansiedad, dejar de la negatividad puede valer la pena. Lee este artículo y aprende a controlar los pensamientos negativos.
Trabajar en tus pensamientos: la mejor inversión
Los neurocientíficos tienen un dicho: “Las neuronas que se disparan juntas, se conectan”. En otras palabras, cuanto más se ilumine una determinada ruta en tu cerebro, más fuertes se vuelven las conexiones a lo largo de esa ruta. Con suficiente repetición, tus hábitos mentales cotidianos se vuelven automáticos.
Básicamente, tus pensamientos tienen impulso. Cuanto más negativo sea tu pensamiento, más fácil será seguir siendo negativo. Sin embargo, lo contrario también es cierto: la positividad lleva a más positividad y también te hace menos reactivo a las cosas negativas.
Por lo tanto, aunque forzar la positividad puede parecer inútil al principio, en realidad hace una diferencia a largo plazo. Puedes fingirlo hasta que lo hagas realmente con positividad , y puedes usar algunos trucos para deshacerte de los pensamientos negativos y convertirte en una persona más feliz y positiva. Ahí es donde entra en juego lo que podríamos llamar “ayuno de negatividad”.
3 maneras de poner a trabajar a tu cerebro para ser más positivo
El “ayuno de negatividad” (o dejar la negatividad a un lado) implica eliminar la negatividad de tu vida y capturarte in fraganti cuando comienzas a girar en el espiral de un pensamiento negativo. Usa estas tres formas para reconfigurar tu cerebro para una actitud positiva.
1. Bájale a las noticias y a las redes sociales
¿Alguna vez has visto un video de alguien parado en una cornisa alta, mirando por encima? Si es así, lo más probable es que tus palmas hayan empezado a sudar. Tal vez tienes esa sensación de hueco en tu estómago.
Eso sucede porque tu cerebro no es bueno para diferenciar entre una amenaza real y una falsa. En otras palabras: no evolucionamos con videos y fotos. Ver cosas aterradoras en forma impresa o en línea ilumina tu amígdala (la emoción y el centro del miedo de tu cerebro) casi tanto como si el evento estuviera sucediendo frente a ti. Incluso sucede con las palabras.
Para tu cerebro, ese accidente automovilístico en las noticias se siente bastante real. Igual sucede con el artículo que leíste esta mañana y que dice que el país se está desmoronando. Es más probable que recuerdes las cosas negativas que las positivas. Las empresas de medios lo saben, por eso las historias más horribles hacen titulares y las historias positivas la mayoría de las veces quedan unos cuantos titulares después o en la página de atrás.
Si deseas reducir la negatividad en tu vida, intenta salir de las noticias y las redes sociales durante una semana, a modo de desintoxicación y para que compruebes el nivel de estrés que estar siempre conectado puede generarte. Las personas que abandonaron las redes sociales fueron más felices en cuestión de días, socializaron más con amigos y tuvieron una visión del mundo menos polarizada, así lo plantea un estudio de la Universidad de Stanford realizado a principios de 2019. Desconéctate de las noticias y las redes sociales para la próxima semana y comprueba si te sientes más feliz.
2. Interrumpe la negatividad con un diálogo interno positivo
Para la próxima semana, procura capturar los pensamientos negativos automáticos, cuándo y cómo surgen. Cada vez que tu cerebro comience a girar en una espiral hacia la negatividad, observa que está sucediendo y luego interrumpe con pensamientos positivos. Por ejemplo, si comienzas a castigarte porque no cumpliste con tu meta en el trabajo, sustituye ese pensamiento con algo como: “Hiciste lo mejor. ¿Cómo puedes hacerlo aún mejor la próxima vez?”
Puede sonar simplista, pero una frase positiva como esa realmente funciona, te hace más feliz y aumenta tu capacidad de lidiar con la negatividad sin dejar que te abrume. Cada vez que se corta un ciclo de pensamiento negativo y se reemplaza por pensamientos positivos, se debilitan las vías negativas en tu cerebro y se fortalecen las positivas. Con el tiempo, irás por defecto cada vez más hacia la positividad en lugar de la negatividad.
3. Recompensa tu cerebro con gratitud
Centrarse en lo bueno de tu vida hace que sea más fácil superar los momentos difíciles. Cuando te concentras conscientemente en las cosas por las que estás agradecido, te vuelves significativamente más resistente a los eventos negativos y eres más feliz en general. Hay muchas maneras diferentes de practicar la gratitud. Agrega una (o varias) prácticas de gratitud a tu rutina diaria y presta atención a cómo te sientes. Este artículo sobre la gratitud puede interesarte.
Dejar la negatividad de lado es una excelente manera de hacer que tu cerebro trabaje para obtener más positividad. Puede ser una herramienta valiosa, especialmente cuando estás atravesando una etapa desafiante.
¡Date una oportunidad y empieza hoy mismo a trabajar en tus pensamientos!
¡Muy buenos consejos!